Por Joseti Marques
No, el amor no puede quedarse en el arrebato de la reconquista y dejar que su historia sea recontada por las sospechosas narraciones de los medios de comunicación fuertemente adheridos a lo que favorezca su apetito -también sabemos cómo lo hacen, porque contribuyeron a las intrigas que nos llevaron a tan nefasta separación. Pero no podemos prescindir de sus discursos y narraciones; sólo tenemos que cuidar los nuestros y dar amplitud a nuestras voces. Sabemos cómo hacerlo, ¿no? ¿O no?